Los libros de fotografía se han revelado como una excelente herramienta expresiva y promocional para los fotógrafos. Está creciendo la producción, la distribución y el interés por este soporte. Su auge es imparable a nivel internacional. Se han multiplicado las ferias, los festivales y los premios dedicados a las publicaciones que muestran proyectos fotográficos de autor. Este panorama se nutre del revolucionario avance de las tecnologías implicadas en la producción de libros y los nuevos canales de difusión, distribución y adquisición establecidos por Internet. Todo esto ha favorecido la aparición de medianas y pequeñas editoriales independientes, muchas de ellas impulsadas y gestionadas por autores, dinamizando este medio y su mercado en el ámbito fotográfico.